Published on

¿ Un millón en una isla desierta ?

Authors

Esta pregunta me surgió charlando sobre la meritocracia y sobre la afirmación de que una persona se merece tanto como es capaz de generar incluso si las cifras son insultantes.

Todos estamos de acuerdo que la retribución de una persona debe ser proporcional con el trabajo, talento o con la inteligencia o capacidad de resolver problemas que aporta. Eso es lo más justo del mundo.

Últimamente va ganando fuerza la idea de que el estado roba a quien más gana. ¿Por qué tengo que pagar más impuestos si me lo he ganado yo honradamente? Estos pensamientos individualistas son cada vez más comunes, pues la sociedad moderna tiende al individualismo.

En la sociedad moderna ya no tenemos los problemas de supervivencia que tuvieron nuestros antepasados. Tenemos acceso fácil a los recursos, no tenemos que ir en taparrabos cazando animales para alimentarnos ni andar buscando agua potable a kilómetros (en la parte rica del mundo).

Todos los recursos básicos están a nuestro alcance y por tanto pensamos que ese es su estado natural. Nosotros sólo debemos centrarnos en generar dinero para acceder a esos recursos. Lo único que importa es la capacidad de generar dinero y no la dureza del trabajo.

Tendemos a obviar que todo este avance no es fruto de nuestro esfuerzo individual, si los tenemos es gracias a la sociedad, gracias a otros seres humanos, gracias a la colectividad.

Si pensamos que el esfuerzo individual es tan importante y todo el dinero que genera una persona es mérito sólo de ella y no requiere de la colectividad. ¿Podría entonces sobrevivir en una isla desierta sin necesidad de nadie más, por su propia meritocracia?

Si una persona gana tanto dinero como otras 100 personas, ¿en una isla desierta tendría la misma capacidad de supervivencia que esas 100 personas juntas?

Todo esto me lleva a pensar que igual deberíamos ser más humildes, que la meritocracia está muy bien, también hay personas que aportan más que otras a la sociedad y se merecen más. Pero fuera de la colectividad no somos nada. Tras reflexionar, identifico tres factores que intervienen en la capacidad de generar valor que tiene una persona.

Primero su propio esfuerzo, eso es obvio, que dos personas con las mismas condiciones y capacidades pueden obtener resultados diferentes solo con la diferencia de esfuerzo que emplean, dos personas igual de inteligentes pueden sacar notas muy distintas en un mismo examen en función de cuanto estudien.

Segundo, el desarrollo de la sociedad, esto es todo el avance que otros seres humanos han ido aportando para que tú te encuentres el desarrollo tal y como está. Pues de no existir la rueda no podrías inventar el coche.

Y por último la sociedad que consume tu trabajo, si te dedicas a vender teléfonos inteligentes generados con todo tu esfuerzo en una isla desierta y no tienes con quien realizar intercambios, de poco te sirve.

El esfuerzo fuera de la colectividad no sirve de nada, de nada sirven los millones en una isla desierta.

Colectividad …